¿Evolución o Involución?
El pasado 24 de noviembre fue el día Mundial de la Evolución. Orgullosos estamos de nuestra evolución como especie, somos más altos, mucho más inteligentes y sobre todo mucho, pero que mucho más guapos. Solemos pensar que la evolución como especie viene determinada por los progresos tecnológicos y de conocimiento, siendo así, está claro que nada nos puede parar. Dominamos el mar, la tierra y el aire, incluso nos planteamos la conquista del espacio. Como especie evolucionada somos ÚNICOS y eso nos hace estar por encima de todo, como si el TODO fuese algo ajeno a nosotros y compitiésemos con él por la supremacía.
Evolución, ¿hacía dónde?. Tal y como nos muestra la imagen a medida que evolucionamos y nos encaminamos hacia esa supremacía, más racionales nos volvemos, más nos domina la mente y vamos perdiendo el sentido de lo que es realmente la vida, hemos ido perdiendo el arraigo y conexión con la tierra y sobre todo hemos ido perdiendo a pasos agigantados la conexión con nuestro interior, con nuestra alma.
¿Evolución?, si es así, no gracias, soy más partidario de parar, de involucionar, de regresar a esa conexión con la madre tierra y con nuestra alma, de no estar en el conflicto supremacista, ni con el TODO ni con mis semejantes, de vivir en la paz no en la razón.
Mi sensación es que, desde que estamos en esta supremacía evolutiva nunca he visto a la gente tan perdida de si misma, mirando al centro de la imagen como guía, al ego, cuando la solución no está en el exterior sino en el interior, en volvernos a conectar, a sentir la tierra bajo nuestros pies y el alma en nuestros corazones.
Involucionemos.
Gracias.